¡Esto es inaceptable! 

Cuando sufrimos dolores de cabeza, ardores de estómago o cualquier otra “leve” molestia, confíamos en que nuestro médico o farmacéutico nos recetará medicamentos libres de efectos secundarios, y cuyos beneficios superarán a los riesgos [1].

Sin embargo esto no siempre es así. Tal y como expresa el divulgador británico Ben Goldacre en su ensayo 'Mala farma' “los organismos reguladores aprueban muchas veces fármacos que son levemente eficaces, con graves efectos secundarios, por la sola posibilidad de que resulten útiles para alguien, en algún sitio, cuando no existen otras alternativas” [1].

¡Pero eso no es todo!

La periodista Martha Rosenberg ha señalado cuatro de los medicamentos más recetados en el mundo pero que pueden llegar a ser muy peligrosos si se toman a la ligera [1].

Dos de estos 4 medicamentos con graves efectos secundarios son:

1. Omeprazol y esomeprazol (Esomeprazol cinfa ®, Nexium mups®): protectores estomacales de uso muy común por las familias para tratar el reflujo ácido y paliar la acidez después de cualquier comilona o noche de juerga.Sin embargo, en 2012 la FDA alertó, que aquellas personas que lo toman a la ligera y de forma continuada están expuestas a una infección por “Clostridium difficile”, una especie bacteriana que es la principal causante de la colitis seudomembranosa, una enfermedad que es potencialmente letal y que cada vez parece ser más resistente a los antibióticos [2]. Otros de los efectos secundarios, demostrados por investigaciones científicas recientes, pueden llegar a ser: mayor riesgo cardiovascular, ya que provocan que los vasos sanguíneos se contraigan, e incluso se les vincula a un mayor riesgo de enfermedad renal crónica [1].

1. La atorvastatina (Amlodipino/atorvastatina Normon ®). Las estatinas son fármacos de los más utilizados en todo el mundo para tratar las distintas formas de colesterol, especialmente la atorvastatina. Sin embargo, los efectos secundarios de las estatinas pueden llegar a ser: afecciones musculares como la mialgia, insomnio, problemas gastrointestinales y dolores de cabeza. Pero tal y como advierte la doctora Barbara Roberts, “Las grandes farmacéuticas han exagerado de forma continuada el beneficio de las estatinas y algunos médicos han asustado a sus pacientes diciéndoles que si dejan estos fármacos tendrán un infarto” [2].

Ha sido ampliamente comprobado que las estatinas reducen el colesterol, pero sus efectos secundarios no han sido tan estudiados y son ampliamente numerosos. No obstante, se siguen recetando a diestro y siniestro.

¡Estos medicamentos deben ser retirados completamente del mercado!

¡Esta es una situación aberrante!

Los laboratorios que comercializan un fármaco deben demostrar que es beneficioso mediante ensayos clínicos.

A continuación, el medicamento es aprobado por las autoridades médicas si, y sólo si, los beneficios para el paciente superan los riesgos (efectos secundarios, complicaciones, etc.).

Y sin embargo, como hemos visto, muchos medicamentos aprobados por las autoridades médicas tienen riesgos que superan los beneficios.¿Cómo llegamos a semejante aberración?

Y lo que es más importante, ¿por qué los aprobaron las autoridades médicas?

Porque sobre el papel, el balance beneficio/riesgo era positivo en el momento en que se lanzaron al mercado.

¿Por qué son perjudiciales ahora?

Hay muchas razones:

• la llegada de nuevos fármacos más eficaces que inclinan la balanza beneficio/riesgo de los antiguos hacia el lado negativo,
• estudios más recientes que cuestionan el balance beneficio/riesgo,
• Los efectos indeseables pueden aparecer varios años después de su comercialización.

Vale, pero entonces ¿por qué las autoridades médicas dejan pasar estos productos una vez que conocen sus poderes nocivos?

¿Es un misterio o una cuestión de mucho dinero?

¿Cómo se puede justificar que se ponga en peligro la salud, o incluso la vida, de los pacientes cuando se cuestiona la eficacia de un medicamento?

¿Cómo podemos justificar que en España se nos prive de los beneficios de las plantas medicinales y la homeopatía con el único objetivo de empujar a los españoles a los brazos de la GRAN FARMA...?

Según las autoridades, la homeopatía sólo tiene un efecto placebo. Sin embargo, muchas personas dan testimonio de sus beneficios. En el peor de los casos, la homeopatía no tiene ningún efecto, pero no hace daño.

La homeopatía lleva décadas asentada en Europa y ha sido reconocida legalmente. Sin embargo el gobierno español ya en 2019 quiso instaurar un plan que incluía a la homeopatía entre las pseudoterapias y proponía excluirla de universidades y hospitales.

Sin embargo no han contado con el apoyo de la UE. España se queda sola en la lucha contra la homeopatía, ya que en otros países como Francia y Alemania, sí que está instaurada y es muy valorada [3]

En Francia, los médicos generalistas y especialistas pueden prescribir homeopatía. Es un país que cuenta con más de 5000 médicos homeópatas. Junto a Alemania, Francia es el principal país consumidor en Europa, con más de un tercio de la población que la consume habitualmente. [4]

En Alemania, las cajas públicas de seguro médico la reembolsan, a veces hasta el 100%. “Aunque la homeopatía no es un método de tratamiento médico reconocido por los científicos, es admirada y muy utilizada”, ha explicado una de las cajas. [4]

En Suiza, en 2017 la homeopatía, la medicina holística, la filoterapia, la acupuntura y la medicina tradicional china recibieron el mismo estatus que la medicina 'tradicional' y fué incluida en los servicios aceptados en el seguro de enfermedad básico. Lo que significa que el seguro puede reembolsar todo tratamiento alternativo realizado por un médico certificado y con conocimientos en este tipo de terapias. [5]

Sin embargo en otros países como en España, crece la movilización en su contra.

He aquí un ejemplo de una de sus campañas:

Campaña del Gobierno de España contra las “pseudociencias” 2018 [6]

Se ha iniciado una auténtica caza de brujas por parte del gobierno contra los herbolarios y farmacéuticos que recetan plantas, mientras que en el extranjero suelen ser la primera solución. 

No tiene ningún misterio, es realmente una cuestión de mucho dinero.

¡Estamos hartos del monopolio de los grandes grupos farmacéuticos!

¡Las autoridades sanitarias deben tomar medidas concretas para protegernos y orientar a los médicos y farmacéuticos hacia tratamientos útiles, ya sean químicos o naturales!

Por eso les pido que firmen esta petición y la compartan lo más posible para que la Sra. Carolina Daria, Ministra de Sanidad:

• retire del mercado los medicamentos potencialmente peligrosos para nuestra salud 
• favorezca las medicinas alternativas, no tienen efectos secundarios al contrario que muchos medicamentos. ¡Tenemos derecho a la libre elección!
• no de más soporte al monopolio de los grandes grupos farmacéuticos 
• que la seguridad social también cubra las medicinas alternativas

Gracias